Un santuario de animales es un lugar en el que animales víctimas de distintas situaciones son recogidos, cuidados y tratados con dignidad el resto de sus vidas. En la provincia de Barcelona se localiza El Hogar Animal Sanctuary, uno de estos refugios en el que conviven numerosas especies de animales. Aunque distintos entre ellos, la mayoría de sus habitantes tienen en común una historia de maltrato y agonía. Una de las iniciativas del santuario para recaudar fondos y seguir con su labor es el hospedaje solidario en La Cabaña.
La Cabaña es como su nombre indica una cabaña de madera situada en los terrenos del santuario, pero separada de las diferentes zonas en las que viven sus habitantes. Es una coqueta casa en plena naturaleza decorada con gusto y en la que no falta detalle. Consta de un baño, un salón con cocina y una habitación en su centro se sitúa un árbol que por la noche se puede iluminar. La electricidad se obtiene a través de paneles solares y el inodoro utiliza un sistema de compostaje en busca de la máxima sostenibilidad y autosuficiencia a la hora de obtener los recursos necesarios. Si quieres ver La cabaña en movimiento, aquí la tienes.
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La Cabaña en el santuario de animales El Hogar

En la imagen superior podéis ver el dormitorio de La Cabaña (puedes contactar a través de su cuenta de Instagram) decorado en tonos claros y estéticamente precioso como el resto de las estancias, además en el salón hay un sofá cama. El dormitorio y las demás habitaciones cuentan con ventanas, así que es tremendamente luminosa. En el exterior dispone de una mesa con cuatro sillas junto enfrente de la puerta. Un poco más alejado dispone de un espacio techado con una mesa de mayor capacidad tan elegante como las sillas que la complementan.

En el exterior La Cabaña está repleta de detalles como esta hamaca para disfrutar de momentos de desconexión y de un merecido descanso. La estancia además incluye el desayuno estupendo y abundante. También puedes encargar comidas o cenas como un extra. Son comidas caseras, abundantes y riquísimas como podéis en las imágenes inferiores.


De los desayunos, comidas y cenas, como de cualquier otra cosa que necesites, se encargan Sol y Balta. Son los que organizan la estancia para que sea perfecta y te preguntan qué actividades son las que te interesan. En nuestro caso, queríamos conocer a los habitantes del santuario e hicimos varias visitas -con todo el respeto del mundo- para conocerlos. Viajamos con una niña y un niño pequeños, pero todo fue de maravilla. Además si tienes suerte por la tarde acuden las ovejas y cabras del santuario a visitarte en su ruta diaria.
